🔹TEA, Autismo, Neurodiversidad, realidad de una condición de vida con millones de miradas particulares. 2 de abril, semana azul.
✨Una visión farandulera de enganche mediático y mercaderista afirma que "el autismo está de moda" y muchos con pose de celebridad han encontrado un repentino diagnóstico a edad adulta y avanzada, hecho presunto que estaría disparando la prevalencia de esta condición de vida en el mundo. La banalización de un asunto de tal relevancia en la vida de millones de familias en la humanidad, pareciera formar parte del inusitado despliegue en la conversación sobre salud mental en la actual década con el legado covid, en donde resulta un sancocho con mezcla de ideas y temas distintos por desconocimiento, infodemia y carencia de rigor mediático. Discapacidad intelectual no es sinónimo de salud mental, ni viceversa.
Una de las formas de alcanzar relevancia en lo público para cuestiones invisibles en derechos de personas y grupos humanos, ha sido otorgar visos de genialidad con la cita de referentes que por su aporte a la humanidad tienen sitio en la posteridad y entonces otra vez la mirada anecdótica posa su foco instantáneo pero pasa de largo sin profundizar lo necesario para comprender lo sustancial sobre el ser, estar, participar, vivir, ser parte de una sociedad saludable con plena garantía de derechos en equidad. Es el caso de los seres humanos que viven en la realidad del denominado trastorno del espectro autista, TEA, socialmente conocido como el autismo con perspectiva prevalente de salud, enfermedad.
La lucha de las familias con notables avances está en lograr el respeto, reconocimiento, restitución de derechos efectivos como cualquier ser humano para una persona con autismo que no es "enfermita", ni padece una dolencia de salud, ni es subnormal, no hay que sanarla, ni normalizarla. Let it be, cantaron los muchachos de Liverpool y el mundo entero tarareo el mensaje quizá sin procesar la idea muchos, la cuestión es dejarlos ser, respetar, comprender, desistir de segregar, excluir, marginar, dañar, ejercer prejuicios y formas de violencia simbólica, actitudinal, verbal, física, por la escala de estigmas, creencias y errores de comportamiento que padece sí, una sociedad disfuncional para el respeto de la diversidad humana. Mil lepras se ha inventado una cultura de vida monetizada, fundada en facturar como fuere, para segregar, marginar y suprimir al que no profesa la religión del éxito monetario a ultranza caiga quien caiga. Capacitismo exacerbado y contaminado de ansiedad por el poder materializado en acumulación, anula todo lo que no factura o lo usa como instrumento para robarle sus derechos.
Este 2 de abril es la movilización global por quinceavo año consecutivo para hacer conciencia sobre otra forma de vivir vida digna autónoma en la especie sapiens, el día mundial por los derechos de los seres humanos con autismo. Naciones Unidas instauró la conmemoración de esta jornada a partir del año en que está vigente la Convención ONU sobre derechos y discapacidad, que obliga a los Estados avanzados en derechos para todos, así sea en el papel, a no impedir, ni obstruir la vida independiente autónoma de los sapiens oprimidos por una realidad social denominada discapacidad. El tema en la jornada año 2023 es dejarlos ser y hacer. Aquí vivimos la convicción de una sociedad para todos como paradigma desde una mirada holística Humanética, vida digna autónoma sin daño desde cada ser humano.
En su narrativa Naciones Unidas da cuenta de cómo en los recientes años de este siglo, se ha avanzado considerablemente en la concienciación y la aceptación del autismo. Esto se debe principalmente a la contribución de los numerosos e increíbles defensores de las personas con autismo que han trabajado incansablemente para dar a conocer al resto del mundo la experiencias vividas por las personas con autismo. No está dicha la última palabra en la discusión semántica sobre los términos creados para limar la acepción negativa y devastadora del lenguaje discriminador, segregador y excluyente. La palabra siempre tendrá poder y las actitudes igual. Que si neurodiversidad, que si los colores son mercantilismo, etc. todo tipo de divergencias conceptuales.
"En el ámbito del conocimiento científico, investigadores y académicos de muchos países han incorporado a su trabajo el paradigma de la neurodiversidad, acuñado por la socióloga Judy Singer a finales de la década de 1990. Cambiar la narrativa: contribuciones en el hogar, en el trabajo, en las artes y en la elaboración de políticas. políticas. Hemos abandonado la idea de curar o convertir a las personas con autismo para centrarnos en su aceptación, apoyo, inclusión y la defensa de sus derechos. Se trata de un gran cambio para todas las personas con autismo, sus aliados, la comunidad de la neurodiversidad y el mundo en general. Les permite reivindicar su dignidad y autoestima, e integrarse plenamente como miembros valiosos de sus familias y sociedades. Este año el Día sirve, además, para destacar las contribuciones que hacen las personas con autismo al mundo en el hogar, en el trabajo, en las artes y en la elaboración de políticas", dice el relato ONU.
En un proceso de treinta años a bordo de la diversidad y su complejidad en el segmento de la humanidad que vive discapacidad, más de mil doscientos millones de personas, una de cada siete, el 15% de la especie dice el movimiento global por los derechos de esta población, la franja con más desafíos en materia de comprensión por lo extenso de las miradas, realidades, tendencias, historias, está en el mundo TEA dentro del colectivo de los seres humanos con discapacidad intelectual. La síntesis de todo está para esta forma de ver y comprender en dejarlos ser y hacer, con todo el respeto por cada vida digna autónoma. Al final esta reflexión no menos importante que todas de Angela Corredor, una luchadora día a día con el autismo:
"El 2 de abril fue siempre una fecha para visibilizar el autismo. Y digo fue, porque ahora es una batalla entre agremiaciones y figuras para hacer el evento más colosal, el más difundido, el más más. La ONU, que al final son personas haciendo community management, se fue por la onda del contaminado paradigma de la neurodiversidad, bastión desde el cual se ha deformado el concepto del autismo, emite un discurso bonito y ya. Los otros 364 días es asunto olvidado. Si vamos a reflexionar sobre esta condición, estaría bueno ser conscientes de cuánta fantasía se le ha agregado al autismo para vendernos la idea sesgada de "forma de ser" y de "ver el mundo", bastante cuestionable cuando toda esta narrativa se choca con realidades fuera de la burbuja, que se promociona en redes sociales y que vende tan bien. Porque al parecer el autismo no se comprende, el autismo factura".
En toda sociedad piensen que uno de cada cien integrantes de la sociedad, o dos de cada cien como en Estados Unidos el lugar con mayor prevalencia, es un ser humano con un lugar TEA que merece el respeto y dignidad que usted quien esto lee, merece por sí mismo y su respetabilidad ganada.
Escrito por Hernando Ayala M. Periodista Mail disnnet@gmail.com