domingo, 31 de diciembre de 2023

2024 Reseteo y Relevo

 

Ética ganar ganar, cualificar capacidad aún si es necesario decrecer. Recomponer. 

 Nuevo ciclo de desarrollo en el ámbito local, territorial. Participar es la clave de exigibilidad.  

Crecimiento sin desarrollo coherente en equidad es la ecuación del mercado que sigue imponiendo las condiciones en el denominado mundo libre que mantiene las brechas sociales, educativas, económicas en todo el hemisferio sur. De nada han valido en este sector del planeta los indicadores de riqueza económica para la superación de las crisis en países como México y Argentina pasando por Colombia, toda Latinoamérica. En el enfoque de competitividad privatizadora estas economías no pasan el año y el augurio no es alentador en 2024.

 Desde la mirada ciudadana de a pie, que no opinión y menos análisis técnico crítico sobre economía y desarrollo, en esa perspectiva base el año 2024 es posible visualizarlo como un periodo de transición para resetear, refrescar y cualificar procesos productivos con enfoques sustentables en las distintas áreas de la economía. Inclusive pensar en expectativas de no crecimiento en resultados monetarios para avanzar en la transformación innovadora posible en prospectiva de más desarrollo sostenible con economía circular, energías limpias en la gestión sobre la mitigación del cambio climático. Cero pánico en la gestión de la economía particular y familiar ante las realidades de la época que llegó.  

Un año para transitar hacia otras y más buenas prácticas para vivir sin daño, sanear, bajar consumos, cualificar potenciar productividad sustentable y limpia.  Ser mejores en crecimiento y prosperidad, humanos más claros, mayor visión de integridad, transparencia, cumplimiento con rigor y exigibilidad. El ciudadano competente, capaz, responsable de su propia conciencia y rumbo con decisiones sustentadas en saber y conocer la realidad.  Es época de relevo de una forma de actuar sobre la base de emociones, creencias, fanatismos cero razón, actos viscerales, parar de crecer el odio por dentro, todas prácticas manipulables para hacer daño, formas de no pensamiento claro que bloquea el crecimiento en integridad personal, familiar y social. Lo individual que prevalece en este tiempo y lo público colectivo que no puede desaparecer.  

Sanear, limpiar, reiniciar, potenciar todo el capital humano y social desarrollado durante la trayectoria para asumir una realidad distinta al dogma del consumo para priorizar una opción de vida sustentable en un planeta vivible para la especie. Decisiones esenciales base para vivir sin dañar que parecieran utopías frente al acostumbramiento y la resistencia a la dimensión ecosocial de la vida para todos en la diversidad. Sin pensamiento ni visión clara no hay como salir de la turbulencia. La ética ganar ganar, sociedad sin perdedores, que nos enseña el filósofo José Bernardo Toro, es todos a conciencia con todas las diferencias protegiendo el ecosistema para la vida sustentable. Es decir cuidar la cancha para poder jugar todos bien, limpio, como debe ser.  El remedio es gratis, voluntad y determinación, mayor potencia humana.   

 

Pensar con capacidad crítica autónoma anula todo engaño y mentira. Escuela Opinadero.

Hay referencias meritorias a la calidad del pensamiento crítico que aportan como línea para las reflexiones propias de cada integrante de una sociedad como la del eje cafetero, foco Risaralda, en el ranking de valoración que líderes de la región realizan en respuesta al estudio Panel de Opinión de Cifras y Conceptos cada año. En 2023 aparecen en honrosos lugares nombres del Opinadero, una plataforma de servicio al pensamiento plural libre y va marcando avance apenas en el cuarto año de estar en la conversación pública territorial, trayectoria que completará el próximo nueve de febrero.

Dice el prestigioso acto de investigación en opinión, que columnistas creíbles referentes de masa crítica en el territorio cafetero entre los más leídos y conocidos son los escritores de opinión Juan Guillermo Angel, Luis Fernando Cardona, Juan Antonio Ruiz, entre otros de esta escuela de opinión que ha empezado a caminar hace ya cuatro años. Pasos emprendidos en un auténtico proceso formador de ciudadanía crítica, autónoma, no engañable en la diversidad de ideas y convicciones, conversación plural en el territorio. Admiración y aprecio por la vocación en esta misión esencial en la conciencia social de democracia, vida libre en esta maravillosa región colombiana. Feliz autonomía, libertad de pensamiento y expresión, democracia efectiva y en práctica día a día durante 2024 y siempre mientras sea el milagro de la vida digna autónoma.  

Opinión Acto Editorial escrito por Hernando Ayala M. Periodista  

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domingo, 10 de diciembre de 2023

Civis Ombuds, ¿ Cuántos humanos sin derechos 75 años después?


  • ¿Cómo formar ciudadanos defensores autónomos de sus derechos sin intermediarios fallidos?  
  • En nombre del derecho a la libertad económica crece la tendencia de regímenes con mayores restricciones a libertades fundamentales. 
Pasaron 75 años desde la proclama universal de los derechos humanos en diciembre 10 de 1948 por la soñada unidad soberana de las naciones que sería capaz de armonizar el respeto y equidad de una humanidad capaz de realizar una gobernanza justa en equidad de derechos para todos en cada territorio autónomo en democracia y contrato social digno, legítimo, respetable para todos en un mundo libre. Libertad, Igualdad, Equidad, Fraternidad, escritas y habladas que no han visto cumplir en su vida miles de millones de seres humanos en la diversidad de la especie sapiens. ¿En qué medida y proporción se cumplen hoy los derechos humanos en las denominadas democracias del mundo libre como la colombiana?. El inventario de hechos contra los sueños escritos en esta declaración universal de 1948 y en el contrato social colombiano, la Constitución Nacional de 1991 carta garantista de derechos en exceso ha dicho la ideología que hizo lo permitido para hacer trizas el Estado Social de Derecho para todos en sus intentos por reformarla y desbaratarla. 

Hay una gran distancia entre la democracia representativa excluyente que rigió cien años en el contrato social del siglo diecinueve reemplazado por la Constitución que hace treinta y dos años nos situó en la ruta de los derechos en equidad, sin exclusión ni desigualdad para ningún colombiano, versículo a versículo en su extenso texto que como la biblia hoy permanece sin cumplir en su mayoría de acuerdos esenciales como el derecho deber de la paz obligatoria que partes interesadas dibujan como imposible. Todos los días hay colombianos sin vida por cuenta de la violencia que persigue a quienes defienden y promueven derechos humanos para todos en los territorios de mayor exclusión y vulnerabilidad. Así el mundo distante del desarrollo en la Unión Europea y la Unión Americana como se llama la República Federal con epicentro en Washington. 

La humanidad excluida de los derechos humanos durante los setenta y cinco años que pasaron, necesita asumir la misión de prepararse uno a uno, cada ser humano, con la información, conocimiento y saber imprescindible en la capacidad de constituirse de manera individual y luego colectiva como ciudadano y ciudadanía defensores directos, inteligentes, competentes, capaces, autónomos de sus derechos por cuenta propia para protegerlos y hacerlos valer en ejercicio efectivo en todos los espacios de su desarrollo y desempeño vital, individual, familiar, social, comunitario, ante el Estado que no garantizar el respeto y cumplimiento de derechos para todos. Cada vez es más evidente la vulneración violación de derechos por actores, agentes de Estado en diversidad de realidades. 

El ciudadano defensor inteligente de sus derechos tiene que comenzar por hacer conciencia plena, apropiación, comprensión de sus derechos para nunca más vulnerarlos, permitir vulneración ni hacerlo con los derechos de todos los otros que coexisten en su entorno vital. Hay ignorancia absoluta en derechos fundamentales, de conciencia, esenciales para el ejercicio de ciudadanía, vida en comunidad, sociedad, como el caso del Derecho a la Información sin cuyo cumplimiento no es posible tomar decisiones en integridad para realizar los demás derechos en vida propia y de los más próximos como también de todos los demás. Muy pocos tienen procesado con aprendizaje de plena comprensión consciente la dimensión, alcance y trascendencia del ejercicio pleno del derecho a la información potable, limpia, fidedigna, como oxígeno indispensable en su conciencia para la toma de decisiones. 

La evidencia de esta realidad se mide en el engaño, manipulación, desinformación, distorsión de la realidad, practicados por los actores de la violencia, corrupción, degradación de lo público en las prácticas de la política electoral y de gestión administración de lo público. La desinformación es la primera y de entrada mayor vulneración que daña el resto del ejercicio de derechos humanos de cada persona engañable, manipulable, usable que todo el tiempo repite engaños sin un argumento sólido y claro para sustentar cada acto violatorio de derechos que comienza con esa repetición, transmisión de engaños y mentiras a través de los canales disponibles en la vida digital y en el voz a voz repetidor de la desinformación en medios masivos desleales con este derecho sagrado de conciencia que dañado y distorsionado se convierte en amenaza mayor que los mismos abusos con los fanatismos religiosos e ideológicos. Donde quiera que haya decisiones impulsivas por emociones activadas mediante fanatismos, ahí está dañado, violado el derecho de conciencia a la información. El único que puede arreglar ese daño es el ciudadano inteligente defensor de su propia conciencia libre, nadie más. 

Esta es la tarea que promueve el proceso Civis Ombuds Sapiens, ciudadano defensor inteligente directo y autónomo de sus derechos sin intermediarios, con la puerta de entrada en la protección y salvaguarda del derecho de conciencia a la información sin engaño ni peligro para la integridad de cada persona. Todo abuso, desde el abuso sexual infantil en adelante, son resultado de engaños, desinformación, manipulación, vulneración de conciencia con sometimiento a actos de violencia que terminan en daño irreparable a la integridad humana. La defensa y protección de la integridad, seguridad, menor vulnerabilidad posible de la persona, comienza con el poder de conciencia de no caer en engaño, impedir desinformación, manipulación, tener la certeza de tomar decisiones que no pongan en peligro ninguna dimensión de su vida en autonomía. Es de ese significado y trascendencia aprender a gestionar desde inicio del ciclo vital la capacidad de entendimiento, comprensión, discernimiento, inteligencia, autonomía, para no comer cuento, no caer en engaño como ocurre con tantos. 

En el tráfico de personas para todos los tipos de explotación y en los mismos falsos positivos a la mayoría de la gente la llevaron con engaños y promesas al destino final que no imaginaron por falta de protección y prevención autónoma frente al riesgo y peligro que reviste este tipo de situaciones. Implicaciones del no ejercicio de un derecho esencial en el punto de partida del ejercicio de vida autónoma, libre, sin ser presa fácil de engaño para tomar decisiones por voluntad propia que llevan a desenlaces que todos los días acaban en realidades no pensadas, imaginadas, inesperadas, muchas de ellas letales. Ni más ni menos es la trascendencia del derecho a la información que muchos aún creen es asunto de medios industriales en el negocio de la desinformación muchos. 

"Tenemos que defender nuestros derechos y los de los demás. La Declaración Universal de los Derechos Humanos llama a todas las personas a defender los derechos humanos. Todos y todas tenemos un papel que desempeñar". Emprender el camino Civis Ombuds Sapiens, es la tarea que nos reunirá este 11 de diciembre en el encuentro Sociedad para Todos, Hitos de Inclusión Real, reunión de voluntades bien informadas que participarán en un reconocimiento como referentes ejemplares de pleno ejercicio de derechos efectivos en vida autónoma desde realidades con mayor grado de dificultad y barreras que impiden la equidad e igualdad en el desempeño humano y la participación social por oportunidades de vida digna. Con todo y el esfuerzo adicional por sobrepasar más barreras que los privilegiados, hay Hitos de Inclusión Real que exaltará el programa Sociedad para Todos desde el derecho a la información en la ruta de todos los derechos. Sintonizados en clave de vida digna autónoma vale la pena avanzar en derechos reales y efectivos para todos desde la plena libertad de conciencia limpia con información potable en la toma de decisiones. 

Opinión Acto Editorial Escrito por Hernando Ayala M. Periodista    

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Dice Naciones Unidas hoy en los 75 años de los derechos humanos

"La Declaración Universal de Derechos Humanos consagra los derechos de todos los seres humanos.
Desde el derecho a la educación hasta la igualdad salarial, la Declaración estableció por primera vez los derechos indivisibles e inalienables de toda la humanidad.

Como "una norma común de logros para todos los pueblos y todas las naciones", la Declaración es un proyecto global para las leyes y políticas internacionales, nacionales y locales, y un pilar esencial de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible mantiene explícitamente que se basa en la Declaración y que dicha agenda debe aplicarse de forma que se hagan realidad los derechos humanos.

La Declaración ha inspirado muchas luchas por una mayor protección de los derechos humanos y ha contribuido a que sean más reconocidos.
En los (casi) 75 años transcurridos desde la proclamación de la Declaración, se ha avanzado mucho en materia de los derechos humanos. Sin embargo, el progreso no significa que la lucha por los derechos y la igualdad haya terminado o termine nunca.

Siempre que se abandonan los valores de la humanidad, todos corremos un mayor riesgo. Las soluciones a las mayores crisis actuales tienen su origen en los derechos humanos.
Las violaciones de los derechos tienen repercusiones más allá de las fronteras y de las generaciones. Estas pueden ser, deben ser, superadas colectivamente.

Tenemos que defender nuestros derechos y los de los demás.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos llama a todas las personas a defender los derechos humanos. Todos y todas tenemos un papel que desempeñar.

Necesitamos una economía que invierta en los derechos humanos y que funcione para todas las personas.
Necesitamos renovar el contrato social entre los gobiernos y sus pueblos y dentro de las sociedades, para reconstruir la confianza y adoptar una visión compartida y global de los derechos humanos en el camino hacia un desarrollo justo y sostenible".