jueves, 30 de diciembre de 2010

DESAFÍOS DESARROLLO INCLUSIVO 2020: TODO POR HACER (I)



DPS DISNNET PRENSA SOCIAL - Sociedad para Todos, emprende en la década que comienza su Escuela del Significado en lo Público, Diálogos de Periodismo con Todos, resignificando el derecho a la información y construyendo la nueva época del periodismo. COFA Confianza Ciudadana.

Comienza la segunda década del siglo veintiuno, pleno tercer milenio. Todo por hacer en equidad social y desarrollo inclusivo. Colombia está en evidencia como sociedad desigual e inequitativa. Los indicadores de desarrollo humano y social no respaldan el discurso de un sistema excluyente maquillado de bondad y libertad, defensor a ultranza de privilegios y concentración de la riqueza. Falta equidad, distribución de recursos, oportunidades y resultados para todos. La sociedad colombiana permanece anclada en un pensamiento feudal, de acumulación, tenencia, combate para defender privilegios económicos y sociales, resistencia del poder político y económico a la transformación social y al reconocimiento de poder ciudadano y de derechos sociales. Los recientes veinte años han sido la constante en este comportamiento. Mejor gastar todo en defender un establecimiento de desigualdad, inequidad y abusos,recortar democracia participativa, antes que priorizar el desarrollo humano, la inclusión social, el crecimiento armónico inclusivo como sociedad.

La década termina con un espectáculo vergonzoso de limosneo, mendicidad y asistencialismo para la cruda realidad de la mayoría de los colombianos, frente a la ostentación y opulencia de un sistema económico inmisericorde y abusivo, que no se ruboriza ante ningún indicador. Solo interesado en mantener el ruido del parlante parroquial para tapar lo impresentable, mientras el mundo, afuera observa todo lo que ocurre.

Ese es el favor que prestan espectáculos mediáticos como el de la colecta televisiva, en donde la farándula usada en papel deleznable de bufonazgo con pose plañidera incluida, lágrimas a raudal, le vende la idea al país de que estamos ante un sistema económico y político generoso y desprendido que saca de su bolsillo y regala a "los discapacitados" algunos miles de millones de pesos para un proyecto filántropo. Muy buena fe en las buenas voluntades trasnochadas en la maratón, pero ignorancia absoluta en el significado y el fondo que reviste en el contexto, el mapa completo de la realidad colombiana, este acto escenificado. Con todo el corazón pero con un significado contrario al deber ser.

El sistema financiero colombiano, treinta millones de millones de pesos, treinta billones en ganancias en 2010. Logrados a base de tarifas abusivas en costos y servicios financieros. La mano en el bolsillo de todo mundo. Que ganen, pero con decencia. Ese desmadre en rentabilidad frente a la crisis social y humanitaria colombiana es ignominioso. Ese sistema, con toda desfachatez sale en primer plano a pavonearse recaudando diez mil millones de la misericordia colombiana a nombre de personas excluidas con discapacidad y anunciando que ha regalado algo así como un millón de dólares, menos del uno por mil de lo ganado quitando comisiones de usura por remesas y consignaciones menores a pensionados, viudas y todo mundo. Que alguien diga y demuestre que esto es honorable.

Los damnificados del invierno, millones de seres humanos excluidos de su entorno. Todo lo material acabado por la imprevisión y la corrupción. En la calle. Necesitan la décima parte de las ganancias de los banqueros para empezar de nuevo. El gobierno lidera una campaña de donaciones y solidaridad. Pero garantiza exenciones veinte veces mayores al capital concentrado para que gane más y haga el favor de quedarse ganando en las proporciones descritas. Los indicadores impúdicos dicen que el desempleo bajó un poquito porque el rebusque, la informalidad subempleo, aumentó. El sistema de seguridad social no funciona. Los industriales no cumplieron, quitaron horas extras y recargos y no aumentaron empleos.

Colombia es vanguardista en desplazamiento de seres humanos. La corrupción es la peor plaga del mal ejemplo que carcomió el imaginario colombiano. Por fortuna declinó el ruido estridente de la política bravucona que mantuvo embelesada y distraída a la parroquia esperando milagros donde no podía haber. Con ese enfoque nunca.

Vacío en noventa por ciento

Aquí no hay vaso medio vacío. El noventa por ciento del vaso está sin llenar, en lo social. Hay una crisis humanitaria y social de esa proporción, mientras los medios cumplen su papel como herramienta de manipulación. Hay que leer el lenguaje de quienes defienden privilegios en los foros de los periódicos en internet. Consuelo de pobres, peor está Haití y el fenómeno prolifera en el tercer mundo.

De tal manera que la situación de la comunidad de personas con discapacidad no es aislada. Es el estado de acultura en equidad, inclusión y diversidad. Es un desorden social que determina la situación de exclusión y crisis humanitaria que postra a Colombia en evidencia ante sí misma y ante el mundo, con indicadores vergonzosos sobre el saldo de la década centrada en invertir todo focalizado en el fenómeno de la guerra. Hay propietarios felices por las ganancias indicadas al comienzo. Ellos no padecen los rigores del sistema de inequidad y exclusión, con concentración de capital que hoy rige en Colombia. Ese modelo aumenta la rentabilidad para el capital concentrado.

Nada fácil salir de este escenario de realidad crítica. Por ello el país se embelesa en los medios con las poses lloriconas de samaritanos que siguen manejando esto de la manera descrita. "No entendemos cómo alguien se opone a esta ayuda maravillosa de los buenos" dijo el locutor de radio con más audiencia estrato alto, en medio de la polémica por la realización de la colecta televisiva. Él hace su propia colecta para los héroes de la patria "duelale a quien le duela porque puedo hacerlo" dice. Pero no comprende, ni entiende el ejercicio de derechos de tales personas.

Colombia, lamentable decirlo, es modelo en donde quiera que haya escuela sobre Desarrollo Inclusivo, de qué no se debe hacer en la materia. Caso, ejemplo malo, de cómo gobernar basados en la exclusión, la inequidad, el capital concentrado en pocos y la desigualdad, con todas sus consecuencias.

Respeto por el trabajo.

Hay iniciativas y trabajo de acción social en respetables organizaciones del tercer sector. Qué tal si no, cómo sería la realidad. Peor. El gobierno focalizado en combatir al enemigo interno, el círculo vicioso del narcotráfico, crimen organizado, grupos armados ilegales y demás plagas afines, deja todo lo social en manos de las organizaciones privadas. Sus programas sociales son asistencialistas, de limosnas en acción y agro repartos seguros anómalos. Por ello el respeto pleno con el trabajo serio y esforzado que intenta suplir semejante vacío estructural.

Ni los hechos ni defensor alguno del modelo colombiano, pueden decir que hay políticas públicas sociales reales y efectivas que hagan posible resolver este panorama. La estructura perversa del modelo está intacta. Habrá paliativos y paños tibios, pero solución de fondo así no.

Todo será como en la colecta del 17 y 18 de diciembre. Pretendiendo apagar incendios con imágenes y postales de humanitarismo.

En Colombia hoy sigue prevaleciendo la convicción según la cual "Es más fácil y rentable dar limosna que cumplir y hacer valer derechos". Es que los buenos somos más, repetía la farándula en la conmovedora escena mediática. No basta creerse buenos si no hay conciencia de lo que hacemos como sociedad. Ignorar el país real es caldo de cultivo de todas las plagas. La proporción es exacta, menos del uno por mil: De diez mil millones a treinta billones de ganancias privadas y una cifra parecida de inversión pública para la guerra.

Respeto total por el trabajo, esfuerzo y buena fe, de quienes han apostado, aportado y apoyado iniciativas dirigidas a construir y mejorar la realidad. Incuestionable el mérito de quienes hacen esfuerzos. Pero además de buena fe hace falta la equidad pública.

La misión exacta del periodismo es hacer comprender el significado preciso de cada hecho en lo público. En el interés común el beneficio debe ser para todos y no solo para unos. Es la verdad del periodismo. Ahí en el escenario de lo público, sucede que lo bueno para unos cuantos en muchos casos como el mapa de realidad visto, no lo es para todos y por el contrario constituye detrimento del capital social, del bien común. Una verdad de interés particular, privado, resulta ser contraria y dañina para el bien colectivo.

Una colecta para un proyecto individual, soportada en el imaginario endeble de una farándula sin capacidad de entender el país completo, centrados en el ombligo de sus intereses de éxito rentable en imagen, causa hondo deterioro en un lento proceso transformador de cultura por el reconocimiento de los derechos ciudadanos de una comunidad excluida y vista desde pre conceptos, estereotipos y estigmas sociales. Así con la rentabilidad vergonzosa de los banqueros, basada en los diez mil que le quitan por cada consignación mínima, de cincuenta mil o cien mil pesos a una viuda o un pensionado. Eso no es equidad ni decencia. Algo y mucho está dañado en las reglas de juego del libre emprendimiento. ¿Cómo montar un banco? preguntó Sofía. Vaya a ver quién puede hacerlo.

Por ello, en desarrollo inclusivo, en equidad social y en respeto por los derechos, es demasiado por hacer, con todo lo que hoy hacen organizaciones, proyectos e iniciativas privadas.

En la siguiente entrega de Desafíos Desarrollo Inclusivo 2020, hablaremos sobre todos los pendientes que inauguran la década a 2020 en el ámbito discapacidad. La primera década finalizó con un balance inequitativo, de incumplimiento público y con visos de retroceso frente a lo tejido durante los primeros años del siglo veintiuno en colectividad. La prevalencia de voluntades individuales impuestas a capricho desde los cubículos de poder burocrático, devirtuó el desarrollo de una auténtica política pública con todos. El tema por fuera del Plan nacional de desarrollo, es un indicador de entrada negativo frente a los grandes desafíos por suplir los pendientes acumulados en la altísima dosis de inercia ciudadana que ha propiciado el estado de cosas con que comienza 2011, inicio de la década de la autonomía ciudadana.

Para que haya transformación efectiva, es indispensable que en países como Colombia, con tal realidad, haya cada día menos ciudadanos subalternos, subordinados y clientes de servidores públicos empeñados en neutralizar liderazgos contrarios a su voluntad, mediante la coptación con dádivas y representaciones ineficaces.

En 2011 seguiremos construyendo masa crítica para un real proceso ciudadano que forme gobernanza en desarrollo humano, social inclusivo en Colombia y la región latinoamericana.
DPS DISNNET PRENSA SOCIAL - Sociedad para Todos, emprende en la década que comienza su Escuela del Significado de lo Público, Diálogos de Periodismo con Todos, resignificando el derecho a la información y construyendo sobre la nueva época del periodismo.

Conciencia crítica, política inclusiva y acción efectiva responsable, es el rumbo.

Salud y capacidad en 2011 para todos.

DPS DISNNET PRENSA SOCIAL
Opinión Editorial Hernando Ayala M. Director.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

TELETON 2010 EDITORIAL DISNNET DPS HECHOS



"En Colombia y Latinoamérica debe dejar de ser más fácil dar limosna que hacer valer derechos" DPS DISNNET PRENSA SOCIAL.

TELETON 2010 - NOTA EDITORIAL DISNNET.
La política editorial de DISNNET como servicio periodístico con marcado énfasis de opinión durante sus recientes años, de los doce que ha vivido en el ámbito público sobre los asuntos de la discapacidad, ha mantenido una línea contraria al asistencialismo y a la venta de discapacidad provenga de donde proviniere. Ha sido un trabajo continuo de periodismo inclusivo sin estrategia económica ni de negocios.

Luego del lanzamiento hecho por el Presidente de Colombia Juan Manuel Santos de la Teleton 2010, Disnnet fue la primera voz pública en manifestar su desacuerdo con la convocatoria que habló de 500 pesos para el futuro de las personas con discapacidad. La incidencia generada determinó suprimir ese mensaje. Luego Disnnet promovió ideas inclusivas como propuesta para transformar este modelo de campaña en un proceso inclusivo con metas inclusivas, apegadas al marco de la Convención ONU de Derechos sobre las Personas con Discapacidad. Disnnet asistió a numerosas reuniones desde su perspectiva periodística e hizo un llamado editorial a la inteligencia colectiva, como también a la libre expresión ciudadana. Nunca se comprometió con liderar ninguna tendencia pues la imparcialidad es la lógica periodística. Disnnet ratificó su toma de partido unicamente por los derechos ciudadanos, posición que lo ha convertido en campaña permanente y voz constante en lo público día a día a favor de la inclusión desde la gestación de este proceso periodístico a partir de 1998.

El proceso de pronunciamiento de la comunidad ha sido visto con respeto desde DISNNET.

Hoy de nuevo en cumplimiento del Derecho a la Información y a Saber en equidad informativa, Disnnet difunde el pronunciamiento de los Consejeros Nacionales de Discapacidad en representación de la comunidad. En medio de la discrepancia y en estricto rigor de equidad informativa, Disnnet es testigo durante esta coyuntura de los siguientes hechos:

1. Un desacuerdo marcado de ciudadanía con discapacidad con la realización de la
Teletón 2010.

2. Una actitud receptiva y abierta al diálogo de parte de la Presidencia de la Fundación Teletón, que reconoció su error de no haber dialogado con anterioridad. Dar la cara no es la actitud de demasiados servidores públicos ante las preguntas sobre discapacidad. Hay demasiados silencios inconvenientes en el proceso público.

3. Un respaldo de la institucionalidad gubernamental, empresarial, de la industria mediática, de la banca multilateral representada en el BID, figuras mediáticas del espectáculo, a una convocatoria que realizará una jornada de 27 horas en los canales privados de televisión. Esta realidad es la cultura a transformar. No es el deber ser de los derechos de las personas con discapacidad, pero es la realidad hoy.

4. Un manejo de mensajes y contenidos mediáticos con la figura de personas con discapacidad que no satisfacen las razonables demandas de la comunidad de personas con discapacidad sobre su imagen social desde la perspectiva de derechos a la autonomía y la vida independiente.

5. Disnnet fiel a la verdad periodística, reconoce en la Fundación Teleton de Colombia una trayectoria de 15 años desde 1995, (posteriores a los quince años de teletones desde 1980) con resultados en inclusión laboral, capacitación para el trabajo, promoción del derecho a la accesibilidad, campañas mediáticas de promoción permanente en inclusión laboral. Estos resultados son respetables y desde este ámbito en la promoción de derechos de las personas con discapacidad Disnnet se relaciona y reconoce en la Fundación un actor relevante en la gestión social con incidencia en el desarrollo de las personas con discapacidad.

6. En opinión de Disnnet, la Fundación Teletón debe asumir con absoluta integridad y responsabilidad, el resultado y peso de su decisión de realizar la convocatoria y jornada del 17 y 18 de diciembre, con todos los aspectos que implica la misma por la forma como decidió llevarla adelante, de acuerdo con la institucionalidad y los actores de poder público, empresarial y mediático, pero sin tener en cuenta al comienzo antes de la convocatoria, la voz ni pensamiento de las instancias representativas de la comunidad de personas con discapacidad en cuyo nombre y con cuya imagen se adelanta la jornada mediática.

7. Disnnet es testigo día a día de diversas y múltiples estrategias públicas de mercadeo en medios de comunicación y en gestión ante instancias públicas, con la imagen, derechos y en nombre de las personas con discapacidad, acciones con manejo y enfoque inconvenientes y contrarios al deber ser de la imagen social de las personas con discapacidad. Sobre ese tipo de acciones que distorsionan la dignidad y derechos de las personas en esta condición de vida,debe existir una acción permanente para desvirtuar la venta de discapacidad que representan. También con la misma lógica a diario son coptados actores del proceso discapacidad por entidades que buscan controlar la gestión pública sin atender un real proceso de participación ciudadana. De igual manera es necesario incidir sobre la actitud de algunas personas con discapacidad que desinforman e interfieren procesos de construcción de imagen inclusiva y equitativa, por prevalecer en el interés particular.

8. No debe existir el silencio prolongado y permanente que se advierte de parte de voceros y representantes de las personas con discapacidad, sobre la cantidad de anomalías, incumplimientos y burla a las normas y políticas que deben ser cumplidas por los responsables de la gestión pública en estas materias para el cumplimiento de los derechos de las personas con discapacidad. Hay demasiados incumplimientos desde lo público validados con silencios inexplicables de representantes de la comunidad.

Disnnet se debe a la verdad de los hechos y por ello expresa su apego a la ética del periodismo. Los hechos están a la vista para el examen de todos los ciudadanos. Cada ciudadano con suficiente juicio crítico debe asumir la verdad de lo acontecido e incidir en la transformación de la realidad descrita, que no se logra con reacciones esporádicas y silencios sistemáticos.

Este acontecimiento de 2010 con todos sus ingredientes e implicaciones, llama a una reflexión de fondo sobre cómo orientar la transformación cultural que debe encausar el deber ser de la gestión pública y las acciones que inciden en los derechos de las personas con discapacidad y sus familias. <> Hasta aquí el contenido editorial DISNNET.

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Documento Público.

COMUNICADO A LA OPINIÓN PÚBLICA CONSEJEROS NACIONALES DE DISCAPACIDAD EN COLOMBIA, REPRESENTANTES DE LA COMUNIDAD DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
Bogotá, 14 de diciembre de 2010

TELETÓN amenaza la dignidad de las personas con discapacidad

Los miembros del Consejo Nacional de Discapacidad, en calidad de representantes de las personas con discapacidad del país; discapacidad física, auditiva, visual, múltiple, intelectual y psicosocial, elegidos mediante Resolución 02730 de 2010, expresamos nuestro desacuerdo con la realización de TELETÓN como una práctica de consecución de recursos en nombre de los niños, jóvenes y adultos en condición de discapacidad de Colombia.

Durante 15 años consecutivos, en el país se desarrollaron jornadas de recaudación de aportes que hoy no se ven representadas en un beneficio extendido a toda la comunidad de usuarios.

Por el contrario, el centro de rehabilitación construido y dotado con el dinero recolectado ofrece servicios de muy alto costo para una población que, en su mayoría, carece de recursos mínimos para acceder a ellos.

Consideramos, que son importantes los avances de la sociedad civil en la conquista de los derechos de las personas con discapacidad y es arduo el trabajo realizado por este grupo y sus organizaciones para incorporar el nuevo enfoque de derechos en la sociedad actual.

Hoy en día, las prioridades del proyecto de vida de nosotros las personas con discapacidad y nuestras familias no se limitan solo a atención clínica o de rehabilitación, sino que se enfoca a resolver necesidades de educación, salud, trabajo, bienestar, recreación, entre otros. En otras palabras, superar la visión en donde la discapacidad está relacionada solo a la enfermedad o deficiencia y cambiar el imaginario en una nueva figura; donde las personas con discapacidad somos ciudadanos con plenos derechos y oportunidades

Como ciudadanos, las personas con discapacidad tenemos la posibilidad de participar en los procesos de mejora de los servicios, en un ejercicio de veeduría ciudadana. Pero esta oportunidad se pierde al recoger los recursos de la sociedad, para destinarlos a una empresa de carácter privado que no le rinde cuentas a nadie y que tiene como objetivo construir más centros de rehabilitación en vez de ofertar oportunidades reales de inclusión social.

Nos oponemos a la Teletón porque de acuerdo a nuestra legislación colombiana y normas de carácter supra - constitucional las personas con discapacidad tenemos el derecho de intervenir en la toma de decisiones, planificación, ejecución y control de las acciones que nos involucran y en la Teletón nunca se ha tenido en cuenta nuestras necesidades como personas con Discapacidad.

El resurgimiento de la TELETÓN representa un retroceso a todo un trabajo de sensibilización e incidencia que se viene adelantando, en un esfuerzo conjunto de los movimientos sociales de personas con discapacidad y sus familias y el Estado. Nunca antes se había tenido tanta unidad de pensamiento entre todos los actores sociales y gubernamentales por la dignidad.

Los lineamientos de Política Nacional del Gobierno deben armonizarse desde el enfoque
de Derechos Humanos consignado en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de la ONU, incorporada en nuestra legislación por la Ley 1346 de 2009, con sentencia de constitucionalidad C-293 de 2010 de la Corte Constitucional. Convención que establece claramente obligaciones al Estado colombiano como la del artículo 4 literal d) "Abstenerse de actos o prácticas que sean incompatibles con la presente Convención y velar por que las autoridades e instituciones públicas actúen conforme a lo dispuesto en ella;".

Es por eso que hoy no podemos darle espacios a conceptos ya evolucionados del siglo
pasado, en donde la noción de caridad y lástima estaban asociados a la gestión de recursos para brindar asistencia a unas personas consideradas como una carga para la sociedad.

Nosotros las personas con discapacidad hoy reclamamos nuestro derecho a ser considerados como sujetos sociales activos y productivos, para lo cual es necesario reorientar las inversiones hacia programas y acciones que aseguren su participación en la vida social, académica y laboral con equidad y respeto.

Esperamos que nuestra opinión sea tenida en cuenta no solamente por las instancias de
gobierno que están apoyando esa iniciativa, que rechazamos categóricamente, sino también los empresarios que aportan a esta causa y los medios de comunicación, que divulgan con tanta dedicación esta practica lamentable para la imagen y la dignidad de las personas con discapacidad y que tienen la obligación de ser imparciales y respetar la opinión de las mismas personas que están siendo utilizadas para fines económicos de terceros.

Cordialmente

Consejeros Nacionales
Consejo Nacional de Discapacidad

Fernando Lancheros
Representante de las personas con discapacidad visual

Germán Guerrero
Representante de las personas con discapacidad múltiple

Henry Mejía Royet
Representante de las personas con discapacidad auditiva

Hernando Mora
Representante de Instituciones para personas con discapacidad

Mónica Alexandra Cortés Avilés
Representante de las Personas con discapacidad intelectual y sus familias

Salam Alexis Gómez
Representante de las personas con discapacidad Psicosocial

William Alonso Riveros
Representante de las personas con discapacidad Física
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portafolio.com.co / opinión / columnistas
Jue 09 Dic 2010 - 7:37 pm

Respeto y enfoque de derechos

El Estado es el responsable, pero no podemos olvidar que todos somos parte de este, y nuestro aporte más significativo se inicia desde las propias familias.

La experiencia de conocer muy de cerca la realidad de la discapacidad me da la autoridad para escribir esta nota. La población con discapacidad quiere que se supere la visión compasiva que algunas familias y personas mantienen sobre quienes enfrentan esa circunstancia. Desea que la discapacidad sea vista como una situación de vida y no simplemente como una enfermedad. Comprende que instituciones privadas recojan dineros para desarrollar centros de rehabilitación, pero no entiende que se exponga su condición con lástima, como pretexto para recaudar esos recursos económicos.

Dicha comunidad quiere respeto para ser incluida en la sociedad y no ser discriminada o estigmatizada. No desea que se le vea en campañas masivas de comunicación como sujeto de caridad, sino como sujeto de derechos y se le reconozca su condición de seres humanos en igualdad de condiciones a cualquier otro ciudadano.

La población con discapacidad pide libertad y autonomía. Quiere amor y comprensión de su familia, trato digno, y el apoyo de la sociedad para construir su camino en este devenir terrenal. Quiere integrarse a la comunidad y serle útil. Esta población sabe que tiene derechos y está dispuesta a asumir sus responsabilidades.

Lo que pide es igualdad de oportunidades. Para estudiar, para aprender,para recrearse, para compartir, para trabajar, para tener amigos, para conocer y ser conocido, para amar y ser amado, para acertar, para cometer errores, para perdonar, para ser perdonado. Y sí, claro, como cualquier otro ciudadano, quiere buenos y oportunos servicios de salud. Igual, desea accesibilidad a los demás servicios y lugares públicos, para recibirlos bien y con calidad.

Antes que campañas masivas de comunicación para recoger dinero, prefiere la colaboración en una gestión efectiva ante la Alcaldía de Bogotá y las autoridades de movilidad de la ciudad, para que corrijan el error que cometieron en los pliegos de condiciones del Sistema Integrado de Transporte, en los que no tuvieron en cuenta sus necesidades.

Esa sí sería una ayuda que serviría de ejemplo ante el país para que la sociedad colombiana avance hacia convertirse en una comunidad inclusiva, que respeta la diferencia y las necesidades de sus distintos grupos poblacionales. Más ciudades habilitadas que centros de rehabilitación.

De acuerdo al Censo del 2005, la población con discapacidad representa el 6,5 % de la totalidad de ciudadanos de este país. Existen quienes consideramos que esa cifra está subvalorada y que podría llegar a los niveles de 10%, como ocurre en otras naciones. Más de 2,8 millones de personas que podrían ser cuatro. Entre ellas, las hay con dificultades físicas,sensoriales o cognitivas. Todas tienen diferentes habilidades y capacidades. Descubiertas o no, deben ser reconocidas y desarrolladas para que esos
millones de ciudadanos puedan educarse mejor, insertarse en la sociedad y disfrutar una vida con la mayor plenitud posible.

Quisiéramos que el Estado avance más rápido en el cumplimiento de los derechos constitucionales y la aplicación de la convención mundial sobre la población en situación de discapacidad. Pero a la par, se debe cambiar el paradigma de la sociedad hacia un enfoque de derechos, alejado de aquel paternalista, lastimero y en ocasiones de rechazo, que prevaleció por mucho tiempo sobre las personas en dicha condición.

Todas ellas merecen el respeto de sus derechos humanos, que se debe materializar en la plenitud de su inclusión social. El Estado es el responsable, pero no podemos olvidar que todos somos parte de este y nuestro aporte más significativo se inicia desde las propias familias, con el reconocimiento y el respeto de las personas en condición de discapacidad.
Autor Augusto Galán Sarmiento Ex ministro de Estado


Comentarios

Opinión
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1 . Por Oblina (Sobre la columna de Augusto Galán Sarmiento).

Vie, 12/10/2010 - 16:5

Comparto completamente su visión necesitamos oportunidades para acceder en igualdad de condiciones al colegio, a un trabajo y a movernos como cualquier ciudadano por la ciudad. El mensaje contundente frente a eventos como la Teletón al que usted se refiere se resume en una palabra: TRANSPARENCIA y es importante que los organizadores le digan a la gente que sus donaciones van dirigidas a construir centros de rehabilitación privados tipo IPS, que van a ofrecer un servicio que es obligación del
Estado, y al cual no todas las personas vamos a tener acceso pues para que nos atiendan tenemos que pagar... o estar afiliados a una EPS... utilizan nuestra imagen para lucrarse y no lo podemos aceptar.


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Naciones Unidas pide a los gobiernos que "hagan más" en apoyo del colectivo, con la
aplicación de la Convención de la ONU sobre los derechos de estas personas y con la
integración de sus necesidades en los programas nacionales relativos a los Objetivos de Desarrollo del Milenio.

DISNNET

Pregunta sin respuesta durante diez meses: ¿Qué espera el Gobierno para depositar el instrumento legal que Ratifica la Convención ONU en Colombia? ¿Qué dice Presidencia de la República a la petición hecha por más de doscientas organizaciones? ¿Qué responde el Vicepresidente de Colombia? ¿Qué contesta la embajada ante Naciones Unidas?