sábado, 27 de noviembre de 2010

DISNNET NO TIENE CONTABILIDAD NI FACTURAS

¿Qué es indecencia?
DISNNET NO TIENE CONTABILIDAD POR PRINCIPIO
Porque no juega a pérdidas ni ganancias monetarias.
El horizonte es equidad, diversidad, inclusión.

"En Colombia es más fácil dar limosna que hacer valer un derecho".

Recuperar hogares para las víctimas del inclemente invierno cuesta al menos dos billones de pesos. Son dos millones de millones de pesos, para mitigar la desgracia de no tener donde dormir. El gobierno sin pudor pide "limosna", colectas, al tiempo que el Inclemente Insaciable Sistema Financiero reporta proyección de utilidades por 27 billones de pesos en 2010. 16 billones utilidades de Fondos Pensionales Privados. La guerra consume una porción parecida del presupuesto nacional al año, 10 veces las necesidades de los damnificados. Es la costumbre y el modus vivendi en sistemas sociales como el que padece nuestra querida nación y toda latinoamerica. Todo el planeta pobre.

Colombia es campeón en inequidad, desigualdad, concentración de riqueza. Hacer colectas en nombre de derechos de personas, no es debido, no tiene presentación, no es decente. Quien se mueva en tal dirección que responda como corresponde ante la sociedad. Toda la sociedad, la comunidad de personas y la institucionalidad del Sistema Nacional de Discapacidad, debe asumir la rendición de cuentas por todas las acciones que vulneran derechos de quienes viven esta condición de vida. Los múltiples y diversos focos de venta de discapacidad, comenzando por los que abundan al interior de la propia población, los más dañinos. "Como te ven, te tratan".

DISNNET no es vocero de colectas ni ventas de discapacidad, tampoco de incumplimientos ni violaciones de normas, leyes y derechos. No se presta para ataques particulares que pretendan tapar todo el mapa de realidad que día a día es validada con comportamientos de connivencia y acomodamiento interesados. Todo el tiempo, a toda hora, hay prácticas de negocio y venta de discapacidad a nombre de la situación, que vulneran derechos de personas en esta condición de vida, la discapacidad.

En DISNNET cuya factura de servicios no la cancela nadie distinto al trabajo de una familia que surte de contenidos el servicio informativo DISNNET, no hemos informado a sueldo ni recaudo de dádivas en los doce años desde el primer día de iniciado el compromiso de construir un patrimonio de respeto y credibilidad, con la tutoría ética de Javier Darío Restrepo, quien depositó el gen imborrable, su ADN ético, pues estuvo en el sitio donde nació el proceso, desde el primer día. Durante ese tiempo, desde adentro, desde afuera, especialmente en la burocracia, siempre hubo voces descalificadoras de un trabajo y un proceso. A despecho de la iniquidad, siempre ha brillado la capacidad, servicio y credibilidad de una tarea libre y limpia, por encima del dolor que causa a tantos no poder someter para sus oídos esta voluntad de hacer periodismo libre. Hechos y evidencias para mostrar.

Contratos van y vienen todo el tiempo, contratación pública y privada de todo, de servidores profesionales de la información, fuera de todo eso ha estado DISNNET. Contratar es lícito, es útil, es legítimo, cuando se demuestra de cara a la sociedad el resultado limpio y efectivo de un trabajo. No cuando se justifica con informes mentirosos el cobro de tareas. Lo anómalo es contratar por vicio, sin resultados claros, para coptar, anular, invalidar, descalificar y acallar. Para usufructuar privilegios, como cuando se interponen leyes para atacar una actividad en nombre de la defensa de los derechos y por la otra puerta se acude a un despacho burocrático a contratar y obedecer órdenes a capricho de un ordenador de gasto público con ínfulas imperiales para someter. Ahí donde la vocación no es servir a la sociedad con actitud de servidor público, sino el pensamiento es pretender subalternos entre los ciudadanos desde un cubículo público manejado como tienda particular o privada, o pose de capataz finquero. Con la doble faz de esa índole no va DISNNET y por ello la distancia con ese tipo de comportamientos. Por un lado aspaviento y pose de defensa de derechos y por otra abdicación de los mismos a precio de dádivas. Así no.

En doce años desde el primer día de iniciado el compromiso de construir un patrimonio de respeto y credibilidad, con ese blindaje ético, mantenemos en alto el escudo de confianza que protege este proceso independiente, autónomo y libre, contra la maledicencia, intrigas y voces solapadas indecentes que desde pasillos de turismo burocrático e inercia en la nómina pública, diseminan rumores para destruir. A DISNNET nadie le pone precio, porque será siempre un patrimonio público ciudadano sin estrategia de negocio ni estrato socioeconómico. Pueden estar tranquilos los negociantes de discapacidad y temas similares. La credibilidad, la imaginación, el lenguaje y la verdad, no pueden ser aprisionados ni funcionan contra la factura o chequera de nadie. Pierden su tiempo los consuetas de los "industriales", vendedores y estrategas de negocios de discapacidad, para acumular poder y finanzas. En mayor medida, nuestra admiración y respeto por la vocación de servicio de los auténticos servidores de los derechos. La diferencia se ve nítida.

En DISNNET no hay lugar para el servilismo, pues está al nivel de la palabra libre patrimonio de la gente. Está en la cultura, como forma de ejercer derechos fundamentales, como método para informar y pensar libremente, para transferir conocimiento, para formar capacidad. Permanece en los bits de todos y un haz de voluntades libres se ocupa de alimentarlo y mantener viva su credibilidad. DISNNET no tiene contabilidad, su manutención corre por cuenta del trabajo de la familia. Funciona como un pensionado libre y grande de grandeza, sin ambiciones emergentes socioeconómicas. Pueden estar tranquilos los ciudadanos limpios y sus derechos, en lo que a DISNNET corresponde. DISNNET está en el aire, en la cultura, en la gente. En los bits, la memoria y el derecho a la información inclusiva con todos. Quede claro para todos y de manera permanente. Nuestra vocación es ser rueda suelta, libre, independiente, no ser ficha de nadie. Cero arrogancia o soberbia, total libertad para garantizar una voz creíble para el ciudadano digno que no vende dignidad ni principios. Ahí vamos de la mano, sintonizados con tantos que viven en esa frecuencia. Mucha es la gente honrada y trabajadora, admirable, que acompaña DISNNET. No olvidar, en estos canales nadie sabe quien lo lee. DISNNET no es estrategia de negocios de ninguna índole. Nuestra auditoría implacable es la credibilidad de la gente <>

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